Toda mudanza abre ventanas a la duda, vértigo en suspenso. Azul infinito al batir falleba, sin ti, este horizonte; sin ti, sin vino derramado. Mirad cómo me empuja el viento del invierno, me borra del verano, me ancla a la frontera. No hay conchas en la playa. Nadie ríe mi nombre.
Tweet |
3 comentarios:
David, esto me ha parecido sobrecogedor.
Así te mudes, así te duelas.
"Etéreo como un sueño y exacto como un logaritmo". Bravo.
David Jota...
Ya te tenía que buscar de nuevo, leyendo el guiño de esta frontera en el blog de Lara.
Mudanza.
Ahora abro esto y me parece un consuelo.
Te leí en "Aquí y ahora"...
Me encantó!
Me alegro haber abierto por fin esta ventana.
Me alegro poseer el recuerdo de una noche en tu casa, de la charla en la barra de este bar...
Un beso muy grande!
Aurélia (la amiga francesa de Lara)
Publicar un comentario